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El progreso en las aulas está en Lajares

La pequeña escuela de Lajares, al norte de la isla, trata de que los menores encuentren su espacio a la vez que se forman

 

Redacción NoticiasFuerteventura

 

El CEIP de Lajares lleva unos años intentando dar un paso más en fomentar la creatividad de los alumnos. Robótica, expresión artística, fomento de la lectura, son cuestiones que para la directora del centro Loida González Montelongo, “crean el marco para formar a personas en valores y académicamente”.

 

En este curso que comienza, esta joven docente trata de concienciar al profesorado de su centro para realizar cambios radicales en las aulas.   “Consiste en crear en las aulas espacios y asientos flexibles, adaptándose a las necesidades del alumnado.”

 

“Nuestro Centro tiene muy presente que es el colegio de los niños e  intentamos en las medidas de nuestras posibilidades crear un ambiente acogedor, estimulante y donde incluso el mobiliario esté ligado a las nuevas metodologías educativas.”, nos comenta.

 

“En el Claustro de profesores nos dimos cuenta que para dar respuesta a uno de los objetivos de la Consejería y de nuestro propio Centro  (el mejorar el rendimiento escolar), teníamos que modificar las aulas, puesto que pasan en ellas muchas horas a la semana.”

 

Acabar con los “entornos rígidos

 

“Pensamos que tal y como son las aulas hoy en día, nos limitamos a que el alumnado llegue y se siente en sus asientos “rígidos” y estén durante horas quietos escuchando a los profesores/as que les da clase.  Es antinatural tener a estudiantes tan pequeños inmóviles en sus pupitres sin la posibilidad de desplazarse libremente y encontrar el entorno en el que se sientan más cómodos. “

 

La máxima de estos docentes de Lajares es que la escuela moderna tiene que adaptarse y ser consciente de que el mobiliario ha quedado desfasado.  El diseño del espacio puede cambiar el modo de pensar, funcionar y reaccionar. “Este tipo de aulas más flexibles incentivan al alumnado a tomar sus propias decisiones. Se trata  de permitir la libertad de movimiento, y modificar la mentalidad de la comunidad educativa. Al modificarlas y sacar el máximo partido de ellas, nos permite crear nuevas realidades”, afirman.

 

En la formación, Loida está enseñando a su profesorado cómo emplear el color en las paredes teniendo en cuenta la psicología de dichos colores y cómo ayudan a estimular  y configurar un ambiente agradable, cómo realizar el proceso de distribución del aula para aprovechar la luz natural  a la hora del trabajo del alumnado, así como los pasos que deben tener en cuenta para la elección de la temática y su posterior elección de colores para la decoración de lapiceros, y otros aspectos decorativos del aula.

 

Ayudas de las familias

 

“No existen muchos recursos económicos para  invertir en este tipo de proyectos pero con la motivación del profesorado y la ayuda de las familias del Centro, se están consiguiendo muchas cosas en poco tiempo. Hemos recibido esta semana una donación importante de pinturas de colores, y contamos con la ayuda desinteresada de profesionales del mundo del diseño y la decoración como Marco López “, afirma la directora del centro.

 

De momento el aula que está de ejemplo para guiar al profesorado en su proceso es la de Loida,  en la tutoría de 4º de primaria. En el aula se realizan las explicaciones de los diferentes asientos flexibles que se pueden emplear en el aula, así como las diferentes metodologías que se pueden llevar a cabo (desde el aprendizaje cooperativo, la gamificación y sin olvidarnos de la educación emocional que siempre está presente).  “Buscamos cualquier momento que tengamos todos disponibles para coordinarnos y ayudarnos. El éxito de un colegio realmente radica en la unión del profesorado y en el hecho de que recuerden que todo lo que hacemos es por el bien del alumnado”

 

 

 

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