YO PIENSO… ¿De quién es la culpa…?

En casi todas las tertulias de los medios de comunicación se oye hablar de lo mal que lo hacen los políticos, incluso en algunas ocasiones hasta se les nombra. Uno de los problemas de los que más se quejan es que no gastan lo presupuestado, lo que hace pensar que solamente lo ponen para propaganda o que no son capaces  de trabajar para conseguir que ese dinero, en algunos casos no se pierda.

Por lo tanto, se les condena con frases merecidas, ¿Pero son ellos, a nivel personal, los únicos culpables?

YO PIENSO… Que no, yo buscaría el origen de esa culpa para conocerla desde el inicio, ¿de dónde viene?

No creo equivocarme, el origen de la incompetencia de los miembros de las corporaciones está en los partidos políticos. Salvo excepciones, a la hora de confeccionar las listas de candidatos, no se buscan personas competentes, capaces de representar al pueblo y al partido. Se busca a personas que sean manejables desde las organizaciones, no importa que sean o no del partido, si tienen esa condición de mansedumbre, es idóneo para la organización o para su dirección.

Cuando los que se sienten miembros de los partidos acuden a las reuniones para elegir a los/as candidatas/os  a los distintos entes públicos, te puedes encontrar con propuestas de personas que no son del partido, incluso algunos totalmente desconocidos, alguien que no habías visto en tu vida, y te los tienes que tragar, de la misma forma que se los tragan todos los votantes. Ellos tienen que votar por convicción, y no conocen a nadie. Así que eso es lo que termina en los entes públicos.

Hay muchas personas sin trabajo, les ofrecen puestos en  Ayuntamientos, Cabildos o en cualquier otro Ente, y ellos aceptan, algunos no tienen ni idea de política, ni siquiera les gusta. Las personas que se interesan por esta profesión (ya hoy lo es para algunos/as) se acercan a los partidos desde jóvenes.

Así nos va, y lo que nos queda que sufrir, que Dios nos de paciencia.