Más de 170 artesanos constructores del instrumento folclórico por excelencia de Canarias acudirán a la muestra

El timple, el instrumento por excelencia de Canarias, se dará la mano con la artesanía y la cultura de Fuerteventura para la celebración de la 38 edición de la Feria Pinolere. El encuentro tendrá lugar del viernes 6 al domingo 8 de octubre.

El timple, el instrumento folclórico por excelencia de Canarias, se dará la mano con la artesanía y la cultura de Fuerteventura para la celebración de la 38 edición de la Feria Pinolere. Tras haber sido aplazada el pasado 15 de agosto, por el incendio forestal que arrasó gran parte de la comarca norte de Tenerife, el encuentro tendrá lugar del viernes 6 al domingo 8 de octubre en el municipio de La Orotava. Allí, bajo el lema ‘Timpleros, muestra regional de artesanos constructores de timples de Canarias’, se hará un reconocimiento a los luthiers de este instrumento musical de cuerda.

Para ello, alrededor de 170 artesanos de distintos oficios tradicionales y de todo el Archipiélago participarán en este encuentro que fusiona arte, tradición y diseño. De hecho, entre las actividades previstas, habrá exposiciones de colecciones de timples, una muestra didáctica de su elaboración y actuaciones con dicho instrumento. La música también estará presente gracias al hermanamiento folclórico de la Parranda El Chaboco de Pinolere y la Agrupación Folclórica Do Lusco ó Fusco de A Guarda (Pontevedra). Eso sí, todo ello marcado por la cultura del municipio conejero de Teguise, donde se dice que “históricamente nació el timple”, tal y como ha explicado Jesús García Rodríguez, gerente de la Asociación Cultural Pinolere, en conversación con TIEMPO DE CANARIAS.

Cabe recordar que la Feria de Artesanía de Pinolere nace en el seno de la Asociación Cultural Pinolere, que surgió a principios de los años 80, cuando el territorio regional comenzó a organizar muestras de los artesanos de las Islas, principalmente de la cestería. Un evento que, en palabras de García, surge “a la sombra de las fiestas del barrio de Pinolere” y que, poco después, “se desmembra de la comisión de fiestas de la Asociación de Vecinos del pueblo, constituyéndose como una asociación cultural”. Desde ese momento, esta pequeña población enclavada en el frondoso monte de La Orotava celebra este encuentro cada año.

Tras la muestra de cestería, llegó la divulgación de la construcción de instrumentos musicales –más conocido como luthería–, en 1996; el metal en 1997, la alfarería en 1998, los textiles e indumentarias de Canarias en 1999 y el trabajo de la madera en 2000. A partir de entonces, la feria también ha permitido acercar a los ciudadanos otras creaciones artesanales, tales como el arte del calado y la importancia de las bordadoras en el Archipiélago, el uso de las pieles en numerosos instrumentos cotidianos o las muestras de cerámica contemporánea, entre otras. Así, desde hace ya casi 40 años, la Feria de Artesanía de Pinolere ha ahondado en la historia de las tradiciones canarias, permitiendo a la población realizar un viaje al pasado para conocer de primera mano el oficio de los antepasados isleños.

 “Creo que la sociedad debe ser consciente de la importancia de perder identidades y una de las identidades que nosotros tenemos es todo lo que está relacionado con la artesanía y los oficios artesanales, porque nos identifican como pueblo”

No obstante, Jesús García Rodríguez asevera que la Asociación Cultural Pinolere realiza numerosas actividades culturales a lo largo del año con el objetivo de apoyar los oficios artesanos y tradicionales, tales como la revista especializada “El Pajar. Cuaderno de Etnografía Canaria” –que es un referente para numerosos investigadores del patrimonio artesanal y etnográfico– o las diversas exposiciones que organizan desde la entidad en distintos puntos de las Islas. De esta forma, el colectivo intenta realzar el valor y el conocimiento entre la población canaria de los oficios artesanos regionales, los cuales, según el gerente de la asociación, “han ido mermando porque han tenido muchas dificultades para sobrevivir por diversas circunstancias sociales”.

En este sentido, García ha realzado el papel fundamental del relevo generacional para que estas perduren no sólo en la memoria colectiva, sino también para que continúen siendo “una seña de identidad” porque “somos un territorio muy rico”. “Creo que la sociedad debe ser consciente de la importancia de perder identidades, como lo son todo lo relacionado con la artesanía y los oficios artesanales, porque nos identifican como pueblo”, ha explicado el responsable de la Asociación Cultural Pinolere.

En la misma línea, Jesús García Rodríguez ha incidido en el valor del sector primario del Archipiélago en estas muestras culturales, puesto que la propia organización “está ubicada en una zona de medianías con mucho arraigo agrícola y ganadero”. En este sentido, el relevo generacional se vuelve imprescindible para mantener viva la tradición. Un reto que la propia Asociación Cultural Pinolere afronta mediante la “concienciación”, pero que, desde la perspectiva de García, se torna difícil que se consolide “si la sociedad en general y las administraciones no se implican más”.

Por ello, por otro año consecutivo, la Feria de Artesanía de Pinolere espera volver a despertar la curiosidad de los canarios y canarias, independientemente de su edad. Para lograrlo, traerán la cultura y tradición de Lanzarote hasta Tenerife, principalmente a través de su figura carnavalera ‘los diabetes’, un personaje muy reconocido por sus pantalones y camisolas blancas con rombos pintados de rojo y negro, el estridente sonido de sus correas de cascabeles y campanas, de la llamativa máscara que cubre sus rostros y sus dos cuernos. Unos diablos muy traviesos que no dejan escapar a nadie, puesto que con un palo zurrón asustan a los asistentes y curiosos.

La Asociación Cultural Pinolere pone a disposición de los ciudadanos guaguas gratis para llegar a la feria, partiendo desde el casco histórico de La Orotava

Mientras tanto, en los más de 10.000 metros que componen el Parque Etnográfico de Pinolere, habrán más de 200 puestos de artesanía de todas las modalidades y carpas donde se podrá conocer de primera mano el trabajo de los timpleros, arropados por diversas actuaciones musicales.

La organización recuerda que pondrá a disposición del público un servicio gratuito de guaguas, que saldrá cada hora desde el centro de La Orotava, de la Avenida Sor Soledad Cobián.

Además, las puertas del recinto abrirán a las 10:00 horas, aunque la inauguración oficial tendrá lugar a las 12:00 horas del día 6 de octubre. Tras este acto, se sucederán las entregas de distinciones, primero la de los Cho Feriantes de Honor 2023, y posteriormente el XX Premio Artesanía y Patrimonio Villa de La Orotava 2023.