El Río Tajo una solución de emergencia frente a los cayucos en 2008
El buque, que trabaja actualmente ayudando en el control de la inmigración irregular en Dakar, es más lento que las pateras
El buque oceánico de la Guardia Civil, Río Tajo, que se encuentra atracado en el muelle de cruceros de Puerto del Rosario organizaba ayer una recepción oficial a las autoridades de la isla.
El Río Tajo es un buque oceánico de la Guardia Civil, con base en Las Palmas de Gran Canaria, de 100 metros de eslora y 10 de manga, utilizado actualmente como patrullero de altura por el Servicio Marítimo de la Guardia Civil para el control de la inmigración irregular, el cual opera actualmente en Dakar, Senegal, y colabora con el Salvamar.
La tripulación alcanza los 23 tripulantes en total. Miembros de la tripulación explicaron a las autoridades locales las características técnicas del buque así como la misión que tienen encomendada. Las autoridades locales han agradecido el gesto de la Guardia Civil y valoran muy positivamente la noble misión de este servicio.
Se trata de un antiguo buque de salvamento construido en Alemania en 1973 y transformado en patrullero por los astilleros Repnaval de Las Palmas, estuvo destacado en Mauritania con el nombre Britannia 1 antes de ser adquirido por la Guardia Civil.
Ya en el 2008 la Cadena Ser se mostraba bastante crítica con la embarcación y su función “la Guardia Civil vuelve a recurrir a un barco viejo para convertirlo en patrullero de altura destinado a la vigilancia de la inmigración clandestina, aunque su velocidad (10 nudos) apenas supera a la de un cayuco”.
Su adquisición y remozamiento constituía en su momento una medida de emergencia ante la avalancha de cayucos cargados de inmigrantes ilegales que se estaba dando en las costas de Canarias.
En su momento estos buques, que recibieron fuertes críticas por su escasa idoneidad fueron por tanto una solución provisional hasta que se pudiera disponer de un patrullero propiamente dicho y de nueva construcción.
