El Cardón de Jandía y la Hubara Canaria, los símbolos de la biodiversidad majorera
Es nuestra responsabilidad seguir cuidando estas joyas de la naturaleza parte de la riqueza de nuestra isla
En estos días en los que nos encontramos en celebraciones del día mundial de la Biodiversidad hay que pararse a valorar las maravillas naturales de la isla de Fuerteventura. Entre ellas dos auténticos tesoros que hay que proteger y que simbolizan el compromiso de Fuerteventura con su medio ambiente, el Cardón de Jandía y la Hubara Canaria.
El Cardón de Jandía es un maravilloso endemismo de Fuerteventura y en estos momentos es el símbolo vegetal de la isla. Pasó por un tiempo muy peligroso cuando fué casi exquilmada por los colecionistas, que arrancaron los ejemplares jóvenes llevándoselos para los jardines particulares.
Hoy día se encuentra con un alto grado de protección y en este sentido es orgullo de los habitantes de esta isla que crece sobre suelos pedregosos y de arenas volcánicas de grandes valles formando parte de los matorrales xéricos presentes en la zona entre los 50 y 300 metros de altitud.
La floración se desarrolla entre los meses de mayo y junio, las flores son pequeñas inflorescencias en los extremos de las ramas y sobre las nervaduras de color verde amarillento y rojizo
Se trata de un arbusto suculento y espinoso con aspecto de cactus de hasta 1 metro de altura. Sus tallos cuentan con entre 8 y 14 costillas armadas de pares de espinas largas y rectas que se agrupan en el ápice. Presenta conjuntos de pequeñas flores minúsculas de color verde amarillento y rojizo que brotan del mismo tallo.
Se encuentra en algunas zonas del Parque Natural de Jandía y sus alrededores.
La hubara canaria
Otro de los símbolos vivientes de la isla es la Hubara Canaria. Se trata de un ave grande, de patas largas y robustas, cuello largo y cabeza pequeña. Es el símbolo animal de la isla de Fuerteventura.
Su longitud oscila entre los 55 y los 65 centímetros, mientras que posee una envergadura que va desde los 135 centímetros hasta los 170. Su dorso es de color arena, con las partes inferiores blancas. Presentan una línea de plumas negras a cada lado del cuello.
Los machos con plumaje nupcial (plumaje que adquieren algunas especies, generalmente coloreado o llamativo, en época de reproducción) tienen estas bandas de plumas negras y blancas muy desarrolladas, presentando además una estrecha cresta blanca en la cabeza. Los juveniles carecen de bandas negras en el cuello.
Su dieta incluye principalmente insectos, sobre todo hormigas y coleópteros, pero también comen frutos, alfalfa, moluscos, lagartos y flores como las de las aulagas.
Su hábitat se encuentra ligada a los ambientes esteparios, estando presente en jables y llanos terrosos y pedregosos. También es frecuente verla en bordes de pistas, malpaíses y cultivos.
La hubara canaria se encuentra incluida en el Listado de Especies Silvestres en Régimen de Protección Especial y Catálogo Español de Especies Amenazadas clasificada como en peligro de extinción y en el Catálogo Canario de Especies Protegidas catalogada como especie en peligro de extinción.
