Rusia se enfrenta al mundo y a la vergüenza
El presidente del parlamento ruso niega la masacre de civiles en Bucha: "Es un montaje para la audiencia occidental”
Las imágenes de civiles asesinados en la localidad ucraniana de Bucha que están siendo documentadas por periodistas y fotógrafos una vez la ciudad ha quedado liberada del ejército ruso dan la vuelta al mundo y provocan estupor, pero Rusia insiste en negarlo todo.
El último en burlarse de la denuncia difundida por el relato de testigos y de reporteros es Vyacheslav Volodin, presidente de la Duma, la cámara baja del parlamento ruso. Volodin asegura que la masacre de civiles de Bucha "es un montaje para la audiencia occidental" que pretende desacreditar a Moscú.
"Washington y Bruselas son los guionistas y directores y Kiev son los actores", ha añadido Volodin. "No hay hechos, solo mentiras". Volodin defiende que "Washington y Bruselas son el guionista y director y Kiev, el actor".
Desde que las tropas rusas se retiraron de los pueblos y aldeas alrededor la capital de Ucrania, Kiev, la semana pasada, las tropas ucranianas han ido mostrando a los periodistas cadáveres de civiles asesinados por las fuerzas rusas, casas destruidas y coches incendiados. Rusia niega todas las afirmaciones.