La violencia de género se convierte en lacra en Fuerteventura (también)
Hay casi 1.5 agresiones machistas diarias en la isla durante el primer trimestre del 2021
La lacra de la violencia de género sigue campando en nuestra sociedad, y aunque dicen las estadísticas que ha bajado este primer trimestre un 4.2% en Canarias, en Fuerteventura se han abierto 120 diligencias por violencia de género entre enero y marzo de este año, lo que significa que cada día se abren 1.5 diligencias por violencia de género, atrás quedan las que no se denuncian. Recordar que las denunciadas son la punta del iceberg.
El observatorio sobre la violencia de género ha dado hoy lunes los datos sobre la situación en el país durante el primer trimestre y en Fuerteventura de las 120 diligencias, 97 fueron por lesiones y malos tratos, dos por delitos contra la libertad, uno por delitos contra la libertad y la identidad sexual, uno contra la intimidad 9 por quebrantamiento de penas, dos por quebrantamiento de medidas y ocho de otras índoles.
Los casos bajan mínimamente en Canarias
Las denuncias por violencia de género registradas en los órganos judiciales de Canarias durante el primer trimestre disminuyeron un 4,6% en comparación con el mismo periodo de 2020, según datos del Observatorio contra la violencia doméstica y de género, que indican que si en el invierno del año pasado los juzgados de las Islas habían recibido 2.092 denuncias, entre enero y marzo de este año el número fue 1.995, 97 menos.
Se teme un repunte al final de la pandemia
La delegada del Gobierno contra la Violencia de Género, la jueza Victoria Rosell advertía hace unos días en una entrevista en El País de “que estamos en un momento muy crítico”, en relación a la salida de la pandemia y el repunte de asesinatos de estos días.
“La covid-19 es una pandemia sobre otra pandemia, la violencia de género. Al levantarse las restricciones, aflora la que había debajo. En 2020 hubo más violencia de control, pero menos violencia física y asesinatos, y ya dijimos que no podíamos lanzar campanas al vuelo, porque era una violencia contenida. Ahora está repuntando con la nueva normalidad, que era una normalidad machista”, afirma la señora Rosell.
“Estamos en un momento muy crítico, esto está relacionado con el poder y la libertad relativa. La violencia machista es una situación de poder. Está muy bien que tengamos este sistema sanitario, que se esté vacunando a esta velocidad y podamos volver a la normalidad, pero a su vez que la disminución de la alerta por la covid no deje atrás la alarma por la violencia machista. Este verano todas las instituciones y toda la sociedad tenemos que estar muy pendientes de que, con el fin de las restricciones, en todas las fiestas, lugares de ocio, verbenas, no haya un repunte de violencia física y violencia sexual. Sería bueno que en cada fiesta local, con el dinero del pacto de Estado contra la violencia de género, que se ha duplicado para los Ayuntamientos, hubiera un punto violeta, al que puedan acudir las mujeres y donde se sientan seguras y se las pueda asesorar. Está en manos de todos que este verano no tengamos que lamentar un grave repunte de la violencia machista”, explicaba la jueza en la entrevista en El País.