Sin obleas La Cocinera se busca alternativa para las truchas caseras de la navidad canaria
Muchas madres no dan con la fórmula para sustituir a una marca que desaparece este año del mercado
La mayoría de las familias canarias consumen truchas en navidad. De batata, de calabaza o de cabello de ángel son unas de las referencias gastronómicas de los isleños.
Este año a muchas madres y abuelas se les ha complicado el tema con la desaparición de una marca de obleas que eran referencia a la hora de hacer este preciado dulce navideño en las islas. La falta de obleas La Cocinera complican la elaboración de las preciadas truchas, "hay otras marcas, pero no tienen nada que ver, queda muy diferente", nos explica una ama de casa de las islas.
El primer documento que cita a las truchas en Canarias data de 1736, mientras que, por ejemplo, los turrones no se consolidaron en la isla hasta bien entrado el siglo XX
El documento en cuestión, es un libro de gastos del Convento de Nuestra Señora de Consolación, en Santa Cruz de Tenerife. En él, queda constancia del pago de “noventa y quatro reales para dos fuentes de dulces para el general y beneficiado; y otros dulces como truchas, rosquetes de dulce y secos, biscochos cubiertos y panal de rosa para los devotos”.
Pero este postre tan típico canario pasa por tiempos complicados, porque sin las obleas La Cocinera y tras buscar otras en el mercado, las madres y abuelas dan la sentencia “no hay nada parecido, son productos diferentes para hornear y la única alternativa parece hacer la masa una misma, lo que conlleva mucho más trabajo y menos posibilidades”